Bienvenidos de nuevo Sinapsers.
Hoy hemos querido enfocarnos en los tratamientos y pruebas de la Esclerosis Múltiple
Ayer mencionamos los síntomas más comunes de la EM, sin embargo, estos síntomas pueden enfocar a su vez otras enfermedades neurológicas. Por ello, la señal que permite definitivamente diagnosticar esta condición es la existencia de como mínimo dos ataques cerebrales o en la médula espinal separados por un periodo de remisión.
Una vez detectadas estas señales, el médico realizará una serie de exámenes para comprobar la disminución de la función nerviosa en las partes del cuerpo. Las pruebas realizadas tendrán en cuenta los reflejos nerviosos anormales, la disminución de la capacidad motora de alguna parte del cuerpo, la sensibilidad y la pérdida de funciones neurológicas, como la visión.
Otra de las pruebas realizadas, será un examen ocular donde se analizará la existencia de daño al nervio del ojo, cambios en los movimientos oculares, cambios en el campo visual, la respuesta de la pupila, problemas en la parte interna del ojo o los movimientos oculares que realiza el ojo cuando se mueve.
Además, se incluyen análisis de sangre para detectar otra afección similar a la esclerosis múltiple, una punción lumbar con el objetivo de analizar el líquido cefalorraquideo, una resonancia magnética del cerebro o de la columna y el estudio de la función neurológica.
Estas pruebas determinarán de forma definitiva la existencia de esta afección en el paciente y el tipo de EM, en las que diferenciamos: la EM secundaria progresiva, en la que el paciente empeora lentamente entre un ataque claro y otro; la EM primaria progresiva, sin ataques claros pero con una progresión gradual; y la remitente-recurrente que estos ataques están separados por un periodo de remisión.
Hasta aquí por hoy Sinapsers. Mañana nos centraremos en el tratamiento y posibles ayudas de la EM.
Despedimos la conexión💥
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